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Desde hace varios años los especialistas en marketing se han mostrado a favor de las estrategias omnicanal pues se han convertido en el mecanismo idóneo para lograr un elevado nivel de satisfacción y lealtad por parte de los consumidores (Jiménez et al., 2019) al permitir la interacción con el cliente a través de diversos canales e incidiendo en la experiencia de compra.
La adopción de este tipo de estrategias surge ante la necesidad y adaptación de las nuevas tendencias entre los consumidores, cada vez son más los compradores que prefieren tanto el canal tradicional como las compras online y la unificación de estos canales supone la implementación de una estrategia omnicanal.
Emplear una estrategia de marketing omnicanal, permite que las marcas busquen mejorar de manera significativa y consciente la experiencia de compra, lo que beneficia directamente la perspectiva que se genera ante los compradores, asociando de manera benéfica a la marca con un sentimiento positivo (Merca 2.0, 2022).